Para muchas de las personas, las fiestas decembrinas son una de las épocas más felices del año, no solo por lo que en si conlleva el significado de la Navidad que tiene tanto de largo como de ancho, sino porque es el tiempo en el que se realizan encuentros con familiares y amigos, se entremezclan todos los sentimientos más profundos que llevamos a flor de piel, se procura buscar los más exquisitos platos para adornar la mesa y satisfacer todos los deseos alimenticios incluido el exceso en el consumo de alcohol. 

Y… ¿Qué pasa cuando llega el nuevo año? Si bien es cierto que se realiza el balance del año saliente y los propósitos para el año que llega con optimismo, también es cierto que no todos lo toman de la misma manera y se alcanza a sentir en algunos la falta de energía por diferentes motivos, en algunos porque no se descansa lo suficiente debido a tanta actividad durante diciembre, en otros el cuerpo alcanza a sentir el estrés que produce el saber que terminaron las vacaciones y que la rutina de enero inicia normalmente volviendo a madrugar y todo lo concerniente a las actividades laborales, por último el aumento de peso por los excesos de alimentos conlleva al acúmulo de sustancias tóxicas producidas por las comidas copiosas, residuos de alcohol y/o nicotina.

Entonces, ¿qué podemos hacer?

Actuar en los niveles físico, emocional y mental!

• Físico:

Iniciar Dieta de Desintoxicación: Aumentar el consumo de frutas y verduras frescas hasta en 5 raciones diarias, por una semana consumir un caldo depurativo elaborado a base de 2 puerros, 2 apios y 1 cebolla. (Efecto diurético, dilatador de los vasos renales y estimulador de defunciones orgánicas), evitar alimentos procesados, grasas animales, embutidos, alimentos muy salados, asados o azucarados, aumentar el consumo de agua, té verde, jugo de piña, comer manzana al vapor o hervida, alcachofa, plátano, aguacate, remolacha, ajo, tofu y ciruelas.

Practicar Ejercicio mínimo 30 minutos diarios con el objetivo de quemar grasa y activar las glándulas sudoríparas.  

No consumir alcohol y para los fumadores por lo menos no fumar durante el tiempo que se encuentran en desintoxicación.

Realizar terapias específicas: Tipo Detox a nivel colónico, hepático, biliar y renal, fortalecer el sistema inmunológico, hacer terapias tipo SPA y de relajación, hidroterapias, utilizar esencias florales (Mimulus, Olivo, Rosa silvestre, castaño blanco) , implementar cromoterapia (blanco, anaranjado, amarillo, violeta o rosa) y la aromaterapia con aceites esenciales de tipo relajantes, equilibradores y antidepresivos.

• Emocional:

Revisar cada uno de los propósitos para el nuevo año y organizarlos con metas a corto, mediano y largo plazo. Incluidos proyectos personales, profesionales, familiares y laborales.

Cambiar las cosas de lugar tanto de la casa, trabajo, escritorio, hasta utilizar nuevas rutas de desplazamiento así sea al mismo lugar y hacer cambios en el aspecto personal como en el cabello, vestuario, etc.

Para situaciones de angustia o estrés hacer ejercicios respiratorios de tipo tranquilizador, tomando aire por la nariz en tiempos (contando hasta 5 mentalmente), sosteniéndolo 5 segundos y eliminarlo por la boca también en tiempos contando hasta 5 lentamente. Este ejercicio se debe realizar 5 veces. (Regla del 5x5x5x5)

• Mental:

Fortalecer los lazos con la experiencia de divinidad que nos acompañe, aquella que brinda seguridad y nos alienta cada día a seguir adelante, ya sea practicando en toda la extensión de la palabra la religión o buscar espacios de comunicación directa y a solas para sentir el acompañamiento en cada paso y la iluminación para que lo que hagamos sea lo más armónico para nosotros y los otros. Lo importante aquí es que nuestro cuerpo sienta seguridad a través de la experiencia sublime.

Abrirnos a nuevos conocimientos que aumenten y alimenten nuestras conexiones mentales y permita crear nuevos aprendizajes sobre nosotros mismos y los intereses que nos apasionan.

Por último y no menos importante, PODEMOS SER AGRADECIDOS con la Vida, con cada una de las oportunidades que nos ofrece, con las personas que están a nuestro alrededor, con nosotros mismos, no les de miedo decir:

 GRACIAS…

¡Éxitos para el 2018!